El vaso medio lleno.

Ya estamos al comienzo de un nuevo año... nos levantamos pensando que las maquinas de afeitar descartables ya no vienen como antes, que solo aguantan un par de afeitadas, a la tercer afeitada ya está vieja, pero rápidamente el espejo nos muestra la realidad, nos devuelve como un cruel cachetazo la "verdadera" imagen del tiempo transcurrido, no la que tenemos de nosotros mismos, si no esa que nos dice en voz baja que lo que esta vieja no es la maquinita de afeitar...
- ¡ y si ! - decimos en voz alta mientras nos afeitamos, casi sin darnos cuenta, - ¿ me hablaste ? - se escucha la voz de la patrona de fondo...
- ! No mami, solo murmuraba ! - Nos seguimos afeitando tratando de emprolijarnos lo más posible, nos lavamos la cara, peine, un poco de loción, y nos quedamos contemplando ese rostro ya con un poco más de cariño, no digo que nos vemos lindos... pero todavía estamos en carrera !
- ¿ pasa algo papi ? - pregunta la patrona notando que estamos demorando 3 segundos 2 décimas de más.
- ¿ Te diste cuenta mami ?, ya hay que buscar para encontrar algunos pelos negros, estoy blanco en canas, tanto la barba como el pelo ! -
- Blanco no, ceniza, ¡ y te queda hermoso ! -
- ¡ Ahh bueee, yo jovato y vos chicata ! -
- ¡ No, en serio, si vos sabes que me gusta ! - La miras a los ojos y no solamente sabes que te lo dice en serio, sino que ya aprendiste a que no vas a poder hacerla cambiar de idea, la abrazas tierna pero fuertemente, agradeciéndole a la vida por otro día a su lado.

¡ Ya te cambio el día !, desayunas mientras repasas las tareas a realizar, sabes que mentalmente estan todos de vacaciones así que decidís que no tenes que tomarte todo tan a la tremenda y que vos también te ganaste el derecho de mimarte un poco, - ¿ y por que no ?, no te digo rascarme 2 meses pero un enero y mitad de febrero a media máquina no estaría mal. -

Mientras tu mujer te mira y se pregunta sino se equivocó de pastillas a la mañana.
Se te dibuja una sonrisa mientras comenzás a tomar conciencia que el Año está en pañales, tenes meses por delante para realizar aquellos cambios que pensabas, la miras a tu mujer, miras enrededor y te das cuenta que tenes mucho, por lo menos lo indispensable para ser feliz, y ya ves el vaso medio lleno... no sabes bien por que, pero estas con todas las pilas !
Le das un beso a la patrona, que te saluda con la misma sonrisa de todos los días y salís a trabajar con una sonrisa dibujada en los labios, mientras pensas...
Otro año más... ¡ La puta !.

Leonardo E. Cano
http://www.ofertasyservicios.com.ar/