Primer encuentro

Corría el año 1967 contaba con mis flamantes primeros siete años, una mañana mis padres deciden llevarnos a mi hermana (un año mayor) y a mi a la plaza del barrio, si bien a los 7 años yo era grandote para mi edad, mi padre medía 1,81 m. y tenía la espalda de un hombre que había practicado boxeo en su juventud, así que como imaginarán para mi era como un ropero de cuatro cuerpos, tomado como siempre de su inmensa mano caminábamos bromeando y riendo los cuatro con rumbo a dicha plaza, al llegar divisamos una niña de unos 9 años, muy menudita que daba vueltas en la calesita de madera que otros niños hacían girar, corríamos con mi hermana al sector de los juegos cuando de repente vemos a esta niña aterrizar de trompa en el suelo, sin pensarlo siquiera corrí a su encuentro para ayudarla a levantar, le estire mi mano y ella la tomo sin dejar de mirarme a los ojos, detrás mío apareció mi padre con un pañuelo en la mano el cual mojó en el bebedero para limpiarle la carita.
- ¿ Te lastimaste hija ? - preguntó mi madre.
- No señora - Contestó la niña, la cual parecía estar acostumbrada a los golpes y caídas al juzgar por algunas cicatrices.
- ¿ Tu mamá ? - Preguntó mi padre con esa voz de trueno que solía poner...
- Trabajando - dijo la niña, la cual agregó,
- me trajo una vecina -.
Encarando mi padre a dicha señora encrespó - Señora, ¿ no ve que la nena se cayo de la calesita ?, ¡ Podría haberse lastimado feo en la manera que cayó !. decía mientras la levantaba en brazos.
La niña abría sus ojos grandes al verse tan alta y a esa montaña de carne que la sostenía...